Ayer vi desde tu terraza los vencejos tejer una telaraña en el cielo. Oí lenguas que no entendía abajo en la calle. Dormitaba en la tumbona y era feliz porque a mi lado estaban dos mujeres que quiero mucho. Mis dos mujeres, mis cómplices.
Gracias por todo, rubia. Te quiero.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Bienvenid@ a Estos días azules.Gracias por tu comentario y feliz día.